La familia Alonso conformó un semilleros en la región del Balsas medio, con varias “ramas” genealógicas, por el momento quiero platicar con ustedes de la que salió de El Reparo, municipio de Ajuchitlán, aunque también residió en Totolapan. Por el momento diremos que inició con Antioco Alonso, quien en reiteradas ocasiones presentó a Magdaleno Feliciano (unos 7 u 8 años mayor que él) como testigo, en sus sus matrimonios, el nacimiento de sus hijos y el deceso de un hermano. La profesión de don Magdaleno Feliciano registrada es la de “labrador”; pero, como sabemos, también fue violinista, y raíz de una familia conocida por el apodo que le impusieron sus amigos: El Puneche; un pequeño pescadito del río Balsas.
El 21 de noviembre, víspera de Santa Cecilia, de 1897, don Antioco Alonso, natural y vecino de Ajuchitlán, con habitación en la Comarca del Reparo, presentó vivo un niño a quien le puso por nombre Gregorio Alonzo, hijo legítimo del compareciente y de su esposa la señora Reyes Bacilia, de 25 años de edad. El niño presentado era nieto por línea paterna de los entonces ya finados: Agustín Alonso y María Jorge Millán; en tanto que por la materna del finado Domingo Felipe y de la señora María Bacilia, entonces de 58 años de edad, viuda.
Aunque parezca raro, Gregorio Alonso y María Ismael Salgado, cuando bautizaron en Totolapan a María, hija natural de Agapita Alonso, hija de José Ma. Alonso y Jesusa Aureoles.
En 1911 Antioco enviudó y se unió en un nuevo matrimonio con Petra Santamaría, aunque en su acta dice que tenía “35” años, en realidad tenía 46; fueron sus testigos: Magdaleno Feliciano, de 63 años, labrador, y a Pedro Calvo, 60 años, artesano, aunque también me parece, miembro de una familia de músicos. Ése año también murió su hermano Benito Bailón, a los 45 años, fueron sus testigos Magdaleno Feliciano y Lucio Pascual, también miembro de una familia de devotos de Euterpe.
En 1920 se presentaron para contraer matrimonio Álvaro Alonzo y la señorita Dolores Jimenez. El primero dijo: ser “originario y vecino de este pueblo”, soltero, jornalero, de 20 años de edad, hijo legítimo de Gregorio Alonzo y de Ismaela Salgado que viven y la pretensa dijo: ser del mismo origen célibe de 16 años de edad, hija natural de la señora Nicolaza Vergara que vive, todos vecinos de Ajuchitlán.
Un año después, en Totolapan, compareció Gregorio Alonzo de nacionalidad mexicana, de 35 años de edad, casado, filarmónico, “originario y vecino de esta cabecera”, en la 3a manzana, quien presentó vivo un niño nacido a las 5 de la mañana de ése día, a quien puso por nombre Vicente, hijo legítimo del señor Álvaro Alonzo de 20 años de edad, filarmónico y de su esposa Ma. Dolores Jiménez de 18 años de edad, casados y de este mismo domicilio; el niño presentado es nieto en línea paterna del comparente y su esposa Ismaela Jiménez y en línea materna de la señora Nicolasa Vergara. Nos queda la duda de dónde nació Álvaro, pero no perdemos la esperanza de encontrar su fe de bautismo o su acta de nacimiento.
En 1925 don En febrero de 1925, el ciudadano Álvaro Alonzo, casado, filarmónico de 25 años de edad, originario y vecino de este pueblo de Totolapan, llevó a registra a su hijo Álvaro, habido con la señora Maximina Bahena, soltera, de 30 años, originaria de Palo Alto Municipio de Arcelia, y vecina de esta población. El niño ocupó el segundo lugar de progenitura “y procede de raza indígena pura”. Sus dos familias vivían en Totolapan y el 22 de diciembre del mismo año, Álvaro y doña Lola, bautizaron a su hijo Nicolás Esteban.
Alvaro murió el 18 de febrero de 1927, y lo notificó al Juez del Registro Civil Gregorio Alonzo casado, filarmónico de 59 años. Quedó registrado que el señor Álvaro Alonzo, era casado, músico, de 25 años, hijo legítimo del comparente y de la señora Ismaela Salgado, dejando viuda a la señora Ma. Dolores Jiménez; fue sepultado en el campo mortuorio del pueblo “y pertenecía a la raza indígena pura”.
En 1930 vivía la familia en la calle de la Reforma, casa número 87, don Gregorio Alonso de “90 años” (en realidad de 62), casado con Ismaela Salgado 38 años, con su hijo Inocente Alonso de 10, y su hija Carmen Alonso de 8.
Todavía no sabemos si la práctica musical continuó entre la familia Alonso después de la tercera generación, pues al registra a su hijo Gregorio (como se llamó su abuelo), nacido el 25 de abril de 1941, en Totolapan, Vicente Alonso, soltero, de 25 años, originario y vecino de La Tinaja, aparece como “agricultor”, ocupación que, como hemos visto a lo largo de estas comunicaciones, es mas un genérico que una especificidad.